Es
relativamente sencillo mejorar la forma física y el rendimiento
deportivo en la bicicleta. Tan solo tenemos que llevar a cabo un plan de
entrenamiento o, simplemente, montar más.
Sin embargo la mayoría de nosotros no hace un plan específico para mejorar la técnica en las bajadas, que por otro lado, para la mayoría de nosotros es la fuente de satisfacción del MTB. Eso también se entrena! Por supuesto que la experiencia es un grado y con los años uno va ganando en habilidad en esos senderos y trialeras que tanto nos gustan. Pero sin duda es un proceso lento.
A mí siempre me gusta decir que existen tres límites que no se deben traspasar: el que impone el propio terreno, el que impone la bicicleta que montemos y el que nos impone nuestra habilidad como piloto.
Últimamente creo que se le está dando demasiada importancia al material que llevamos: suspensiones, recorridos, cubiertas, tijas telescópicas, cubiertas, presión de ruedas y un largo etcétera que copan muchas de las conversaciones de corrillos y foros MTBteros. Por supuesto que el material ayuda, pero sin ningún lugar a dudas el mayor recorrido de progresión lo tenemos en nosotros mismos y a éste punto no se le presta la atención necesaria.
Veo muchos bikers con verdaderos pepinos de bici estancados en sus miedos y afianzándose en malas costumbres que, de no hacer nada, arrastrarán durante años. Por supuesto que existe diferencia entre llevar una rueda de 2.0 y una de 2.1, una horquilla de 120mm y otra de 140mm y llevar una presión u otra, pero sin duda, estoy convencido que más allá de la autosugestión, el 90% de la gente no va a notar y sacar partido a esas diferencias. Si veo muy importante la elección de la cubierta delantera, no menos de 2.1, con un buen taqueado y agarre, es fundamental. La trasera importa menos en mi opinión.
Cuando me enganché a este deporte, el grupillo con el que montaba estaba loco por las bajadas trialeras, pero como las bicis que llevábamos eran una patata comparadas con las de ahora, claro, lo que venerábamos de verdad era a ese compañero virtuoso que iba un poco por delante de nosotros, del que todos aprendíamos.
Por supuesto también hacíamos nuestros cambalaches con las cubiertas, manillares, frenos, radios, radiado de las llantas,… Pero desde que empecé con una bici completamente rígida con frenos cantiliver, hasta ahora, que todos llevamos horquillones de aire-aceite y frenos de disco hidráulicos, se ha avanzado mucho en ése sentido pero, si soy sincero, no creo que ahora disfrute de la bici más que antes.
Si estás decidido a no quedarte atrás en las bajadas en tus salidas de fin de semana y quieres progresar, haz algo para que eso ocurra! Ten determinación para avanzar. Deja por una temporada de invertir en material e invierte un poco en ti mismo. Aquí os dejo algunas ideas claves para beginners.
Aun veo mucha gente con las manetas sin la inclinación adecuada (demasiado horizontales) y demasiado al borde del manillar no permitiendo llevar las muñecas y antebrazos en una posición cómoda. A ser posible, ajústalas de manera que lleves un solo dedo en la parte externa de la maneta y que la rueda frene completamente en seco en la parte final del recorrido de la maneta, cerca del manillar. Si tienes dolor de antebrazos en las bajadas ya da igual el tarado de la horquilla o la presión de las ruedas, no bajarás bien.
No te quedes solo.
Intenta ir detrás de alguien que baje bien. Fíjate en la trazada que elige, su posición en la bici… Pícate un poco con alguien. Si te acostumbras a quedarte solo bajando por eso de “yo voy a mi aire” acabarás por preferir ir así siempre, porque cuando vayas detrás de alguien o vayan detrás de ti, te pondrás nervioso, no bajarás bien.
No tengas tanto miedo.
Si te caes no pasa nada. Que no suene raro, hombre, hay que intentar no hacerse de daño, pero no conozco a nadie que baje bien que no se haya caído mil veces. Revolcón, risas de los colegas y a la bici otra vez. Mañana en la ducha escuece el raspón. Si tienes miedo, no bajarás bien.
Si te caes no pasa nada. Que no suene raro, hombre, hay que intentar no hacerse de daño, pero no conozco a nadie que baje bien que no se haya caído mil veces. Revolcón, risas de los colegas y a la bici otra vez. Mañana en la ducha escuece el raspón. Si tienes miedo, no bajarás bien.
No frenes tanto.
La mayoría de los revolcones que nos llevamos es por frenar donde no debemos y/o demasiado. Llevamos buenos frenos, ya lo sabemos, pero en las trialeras hay que llevar un poco de ritmo para llevar cierta inercia y que la suspensión haga su trabajo, confía en ella. Preocúpate de la trazada y de que la bici vaya por donde tú quieres y no al contrario. Si dejas que el pánico te invada, tiras de freno y no pilotas la bici, no bajarás bien.
La mayoría de los revolcones que nos llevamos es por frenar donde no debemos y/o demasiado. Llevamos buenos frenos, ya lo sabemos, pero en las trialeras hay que llevar un poco de ritmo para llevar cierta inercia y que la suspensión haga su trabajo, confía en ella. Preocúpate de la trazada y de que la bici vaya por donde tú quieres y no al contrario. Si dejas que el pánico te invada, tiras de freno y no pilotas la bici, no bajarás bien.
Practica un poco la técnica.
No importa la edad que tengas. Vé a un campillo, intenta un caballito, mantén el equilibrio en parado, pega saltos en rampas, busca un banco para hacer equilibrios con la rueda delantera, intenta ir por sitios muy estrechos o bordes de jardineras, todo lo que ganes en habilidad en la bici mucho mejor. No te de vergüenza que te vean haciendo el muñón en un parque solitario. Si no pilotas la bici, no bajarás bien.
No importa la edad que tengas. Vé a un campillo, intenta un caballito, mantén el equilibrio en parado, pega saltos en rampas, busca un banco para hacer equilibrios con la rueda delantera, intenta ir por sitios muy estrechos o bordes de jardineras, todo lo que ganes en habilidad en la bici mucho mejor. No te de vergüenza que te vean haciendo el muñón en un parque solitario. Si no pilotas la bici, no bajarás bien.
Colócate bien.
Échate un poco para atrás. Es muy importante llevar los talones bajos. Es decir que el ángulo entre el empeine del pie y la espinilla sea de menos de 90 grados, los bíceps femorales pegados al sillín y un pedal ligeramente más alto que el otro. Como si con los pies quisieras empujar la bici contra los pedrolos. Pruébalo! Esto hará que los impactos horizontales del terreno en piedras, raíces y demás sean absorbidos por la parte inferior del tronco. Si no lo haces así y llevas los “pies planos”, las irregularidades del terreno que te frenan las tendrás que absorber con los brazos y hombros, tendrás que ir haciendo presión sobre el manillar, demasiado apoyado en él: te dolerán y no manejarás bien el manillar. No bajarás bien.
Todo esto son opiniones de un humilde servidor. No hagáis demasiado caso y, sobre todo, no os olvidéis de disfrutar. Es lo único de lo que se trata!!!
info:todomtb
Super interesante, este articulo aqui os lo dejo.
ResponderEliminarMuy bueno, a ver si tomamos nota.
ResponderEliminarHola, gracias por los consejos, yo soy de los que freno demasiado, poco a poco me voy soltando, pero es lo que me cuesta.
ResponderEliminarSaludos. Fernando.
Buenas Fernando agradecerte tu visita y que sirva de algo pasarte por nuestro blog.
EliminarUn saludo y hasta pronto...